En el año 1995, junto a Macarena Chías además de casarnos, fundamos el Instituto Galene de Psicoterapia y creamos la Psicoterapia Humanista Integrativa, que es una forma de trabajar con el paciente desde el corazón, poniendo en el amor de la relación terapéutica, la clave fundamental del proceso terapéutico de nuestros pacientes.

Pienso que lo mejor de este mundo es ayudar a las personas a mejorar sus vidas y eso es a lo que dedico la mayor parte de mi tiempo profesional.

Creo que es muy importante construir un espacio protegido para que el paciente pueda sentirse lo suficientemente seguro para abrir sus conflictos más profundos.

Acompaño a mis pacientes a crecer y a sanar sus vidas. Realizamos un viaje extraordinario cargado de emociones y aprendizajes compartidos. Se abren puertas y los descubrimientos pueden ser asombrosos.

Creo firmemente en el poder curativo del amor y en la posibilidad de restaurar y sanar las heridas emocionales del pasado.

Además de trabajar en psicoterapia también soy supervisor y enseño la profesión a futuros psicoterapeutas y counsellors, en el “Máster en Psicoterapia Humanista Integrativa” y en el “Máster en Counselling Humanista Integrativo”.

Disfruto muchísimo con lo que hago y aun estando seguro de que cometo muchos errores, creo que lo hago suficientemente bien y que las personas que se forman con nosotros aprenden a trabajar con un alto nivel de calidad.

Me encanta viajar, conversar, compartir con los amigos, el cine, las series, leer, pasear por la naturaleza, …. y el Mar.

Me gusta escribir y compartir mis ideas con los demás. En 1991 publiqué mi primer libro “Te lo digo porque te quiero” que salió en España, Portugal y Méjico. Le siguieron “Me gusta hacer el amor”, “Me gusta crecer a tu lado”, y ya con Maca, escribimos  “El Duelo Terapéutico”, “EmocionArte con los niños” y en 2017 “Técnicas de Trabajo emocional en Psicoterapia”.

Desde hace poco más de un año escribo un blog: ”El Factor Emocional “ y sus post son publicados en “The Huffington post”.

Desde la honestidad y el respeto, acompaño a mis pacientes desde 1987. Han pasado muchos años desde entonces en los que he aprendido, sufrido, crecido, llorado, reído, soñado, creado y disfrutado mucho. No ha sido fácil este camino pero si pudiese volver atrás, lo repetiría sin dudarlo.

Pepe
Colegiado Nº.: M-31126